“¿Sabías que el placer produce una impronta sobre nuestro cerebro que actúa como refuerzo positivo de esa experiencia? ¿Sabías que Masters y Johnson, pioneros de la sexualidad experimental, demostraron que en una relación homosexual, a menudo, hay más placer que en una relación heterosexual simplemente porque la pareja sabe cómo y dónde tocar; de qué manera estimular y excitar?”.



29/6/07

Factores

Factores causantes de la homosexualidad Los orígenes de las inclinaciones y los comportamientos homosexuales Por Richard Fitzgibbons, M.D. Los orígenes de la homosexualidad
Los conflictos más comunes que predisponen a las personas hacia la homosexualidad son 1- la soledad y la tristeza, 2- profundos sentimientos de ser inadecuado y la falta de autoaceptación, 3- la desconfianza y el miedo, 4- el narcicismo, 5- el excesivo sentido de responsabilidad, 6- el maltrato sexual en la niñez y 7- el enfado excesivo. Durante los períodos de tensión, estas dificultades internas se activan. Entonces pueden surgir fuertes tentaciones homosexuales en un intento por encontrar alivio o un escape al dolor emocional inconsciente. Esta dinámica de dolor emocional que puede llevar a la homosexualidad rara vez se manifiesta durante la infancia, pero normalmente se revela al principio de la adolescencia. Veamos a continuación con más detalle cada uno de estos factores causantes de la homosexualidad que hemos mencionado:
Cuando no se satisface la necesidad de cariño, aprobación, afecto físico y ánimo de un padre, se desarrolla un vacío interior comúnmente llamado "hambre de padre". En un intento por superar este dolor, algunos adolescentes y jóvenes adultos buscan el confort de ser abrazados por otro hombre. En mi experiencia clínica he observado que mientras más temprano es el abandono paterno, mayor es la posibilidad de que se desarrollen tentaciones homosexuales. Mientras que muchos hombres no han recibido el ánimo y afecto físico de sus padres, y nunca han desarrollado inclinaciones homosexuales, los particularmente vulnerables son aquellos que, a causa de limitadas actitudes atléticas, tampoco fueron aceptados por sus compañeros.
La falta de cariño, afecto y ánimo de una madre también puede producir un vacío y una terrible tristeza. Algunas chicas intentan llenar ese vacío del amor materno dulce y consolador por medio del comportamiento homosexual. Esta "soledad sin madre" no se observa tan a menudo como la "soledad sin padre", porque las madres generalmente tienen mucha más libertad a la hora de comunicar su amor y su ánimo a los hijos que la que tienen los padres.
Profundos sentimientos de ser inadecuado y falta de autoaceptación La homosexualidad también puede ser el resultado de fuertes sentimientos de inseguridad. La desconfianza en sí mismo se suscita por el rechazo de padres, compañeros, hermanos u otras personas significativas en las cuales se ha depositado la confianza. En un intento inconsciente de deshacer una historia de rechazos, la persona busca reafirmarse y ser aceptado por miembros del mismo sexo. En mi experiencia clínica este doloroso conflicto emocional se observa mucho más frecuentemente en hombres que en mujeres. La autoestima se basa principalmente en la aceptación de un modelo de conducta en la primera infancia, el niño de su padre y la niña de su madre. Todo niño pequeño añora recibir la aceptación, al apoyo y el ánimo de su padre -- de esta forma establece un sentido positivo y un grado de bienestar consigo mismo. Aunque el amor de una madre es esencial para los niños, no es tan importante como el amor y la afirmación del padre para la formación de una sana identidad masculina. La falta de reacciones positivas de un padre produce una seria debilidad en la imagen masculina y una falta de autoaceptación. Muchos de los que sufren inclinaciones homosexuales crecieron de niños pensando que nunca podrían agradar a sus padres. Los hermanos mayores también juegan un papel importante en la formación de una positiva identidad masculina en la infancia. Los rechazos en estas relaciones pueden producir un serio debilitamiento de la autoestima masculina.
En los 50 y 60, se realizó un estudio en Nueva York de 500 varones que se consideraban homosexuales. El estudio reveló que más del 90% de ellos tenía problemas de coordinación atlética y que de pequeños fueron objeto de humillación por parte de sus compañeros. Muchos contaron que no sólo se sentían fracasados como varones porque no eran buenos en el deporte o porque no les gustaba, sino que también sentían que desilusionaban a sus padres, quienes -- en su opinión -- esperaban que fueran buenos atletas. La falta de interés por los deportes interfería en la relación y unión íntima entre padre e hijo. La necesidad de ser aceptado por otros varones es esencial para el desarrollo de una positiva identidad masculina y es anterior al nivel de desarrollo adolescente. Si la autoaceptación no ocurre por medio de la afirmación de otros compañeros, raramente podrá un muchacho sentirse atraído hacia las muchachas.
Los conflictos básicos de una baja autestima se manifiestan de diferentes maneras en los varones que tienen inclinaciones homosexuales. Entre estos conflictos se encuentran: una atracción obsesiva hacia hombres atléticos y musculosos; una necesidad excesiva de actuar de forma agresiva; una necesidad compulsiva de aumentar la musculatura; y un profundo sentimiento de no ser amados.
Trauma sexual en la infancia Un buen número de varones que fueron violados o maltratados sexualmente en su infancia desarrollan una confusión con respecto a su identidad masculina. Al igual que otras víctimas de violación, piensan que de alguna manera causaron el abuso. Durante la adolescencia, su relación con las muchachas está mermada por la vergüenza y por la creencia de que ninguna chica podría amarles si conociera sus experiencias sexuales.
Enfado excesivo El tipo de enfado que más induce la homosexualidad es el enfado consigo mismo. Como resultado de un continuo rechazo por parte de sus compañeros, muchos niños adquieren un intenso disgusto hacia sus propios cuerpos – piensan que éstos son débiles, poco atractivos y poco masculinos. Se sienten tan incómodos con su físico que pasan muchísimo tiempo fantasiando sobre cómo escapar de su cuerpo y entrar en el cuerpo de otro. Esta ilusión enfermiza puede empezar cuando son jóvenes e inducir una fuerte atracción física hacia otros del mismo sexo. La experiencia de ser sostenido y abrazado por alguien del mismo sexo puede disminuir el sentido de autorrechazo durante algún tiempo. Sin embargo, la incomodidad o el disgusto hacia el propio cuerpo persiste, a pesar de la afirmación, afecto o actividad homosexual. Esto ocurre porque el afecto en la adolescencia o después de ella no puede deshacer el odio hacia uno mismo que se ha experimentado en la infancia y en la adolescencia.
Paul era sensible y muy tímido debido a su pequeña estatura. Aunque no se sentía directamente rechazado por sus compañeros, se sentía débil e inadecuado. Como no era físicamente fuerte, pensaba que no podía practicar ningún deporte. A medida que aumentaba en él el sentimiento de auto-aislamiento de sus compañeros, también aumentaba el disgusto hacia su propio cuerpo. Le preocupaba mucho su apariencia física y nunca se sentía cómodo quitándose la camisa en el vestuario de la escuela o en la piscina en el verano. Antes de su adolescencia, Paul empezó a obsesionarse con los cuerpos bien formados de sus amigos. A este pensamiento obsesivo le siguieron fuertes sentimientos de atracción hacia esos muchachos y luego deseos homosexuales. Cuando comenzó a practicar la homosexualidad en la universidad, usualmente se imaginaba que asumía el cuerpo de sus compañeros homosexuales y que se despertaba con un físico diferente. Sus primeros encuentros homosexuales le produjeron un sentimiento muy superficial de sentirse especial y de ser amado, pero no le daban una mayor auto-aceptación. De hecho, a medida que caía en la promiscuidad se sentía cada vez más incómodo consigo mismo, entonces decidió empezar a recibir terapia.

Consejos prácticos

Ahora que has iniciado el camino de la sanidad, luego de tomar la liberación que dá Dios a través de la crucifixión de Jesucristo, necesitarás pasar revista a hábitos, relaciones, circunstancias, etc., que te eran familiares.
De cada una de ellas tendrás que tomar nuevas decisiones.
He aquí algunos consejos: deshazte de los números de teléfono
de las personas con las cuales tuviste relaciones sexuales.
Borra de tu msn todos los Contactos con los que tuviste charlas y con quienes has tenido relación sexual o aún relación sexual virtual.
Quita de la memoria de tu computadora o de Favoritos, todos los Sitios de pornografía, tánto gay como heterosexual.
Anuncia a los amigos circunstanciales que hayas tenido (en caso que te requieran para nuevas relaciones sexuales, si no , no) que estás en un proceso de sanidad emocional, espiritual y sexual.
Te presente que si no has tenido una experiencia con Dios, de haberle entregado tu vida y decirle que Él se haga cargo de ti, tu pasado, presente y futuro, esta tarea te resultará muy difícil, con poco logro y posiblemente te desanime.
Es necesario que te reconozcas débil y arrepentido de todos tus pecados le pidas a Dios su perdón y su limpieza, junto con eso, Dios comenzará la sanidad Divina, y tú harás tu parte.
Evita los lugares, sitios sociales que te provoquen a reincidir en los hábitos de antes.
No te detengas a mirar por tv lo que puede excitarte.
No dejes que los pensamientos se aniden en tu mente.
No mires la segunda vez, la primera mirada no es pecado, ni es riesgosa, pero en la segunda ya puedes elaborar mentalmente lo que pudieras hacer con la persona que estás viendo.
Observa los cambios que tú y Dios van haciendo en tu persona, y dá gracias a Dios por eso.
No te desanimes nunca.
Evita por todos los medios tener de reserva algún dvd o revista pornográfica, deshazte de esas cosas, si guardas algo de reserva, te tendrá atado y detenido en el proceso de sanidad, porque continúas esclavo, recuerda que Cristo nos dá la liberación en la cruz, solo hay que tomarla.
Recordar que la liberación no significa sanidad, ni que por ser libre no recordarás mas tu pasado, y/o que tu inclinación
y atracción por personas de tu mismo sexo desaparecerán en un momento.
El proceso es diferente en cada persona, pero se puede vivir por encima de la esclavitud sexual.
Trata de no estar solo.
No tengas la computadora en tu habitación, ponla en un lugar donde otros puedan ver qué estás viendo, en qué Sitio/Página estás conectado.
Participa de amistades mixtas, vale decir, hombres y mujeres, y que sean heterosexuales.
Congrégate en una Comunidad religiosa en donde puedas hacer amistades espirituales y también trata de conseguir apoyo espiritual, no necesariamente debes contar qué te sucedió, o qué viviste, pero si Dios te guía hacia un Consejero o persona madura espiritualmente, encontrarás una herramienta para tu favor.
Busca una persona que te conozca, que te comprenda, que no sea homosexual, (unicamente que esta persona (si es homosexual) esté en franca sobriedad sexual por muchos meses), a quien le rindas cuentas de tus avances y luchas.
Intenta no masturbarte.
No quieras cubrir las necesidades físicas y emocionales con otros elementos como alcohol, drogas, comida, etc.
Ponte metas chicas, alcanzables, deja que las metas mas grandes las elaborará Dios.
Felicítate por ser una persona que está luchando por lograr un cometido loable.
Hazte de material literario que te ayude en este esfuerzo, en el Blog, hay referencias a libros relacionados.
Congregate semanalmente.
Lee la Biblia.
Ora a Dios.
No te desanimes.

Homosexualismo y lesbianismo

Los homosexuales no son los "afeminados". Los que han sido atrapados por el homosexualismo son personas que por lo general están cofundidos en una extraña trama. Son hermanos, hermanas, hijos e hijas, personas de todos los senderos de la vida que están envueltos en un serio problema. Es la peor clase de prejuicio pensar de los homosexuales como monstruos, excéntricos o maniáticos sexuales. Es absolutamente anticristiano el ponerles motes, escarnecerlos y riduculizarlos, puesto que son personas que están luchando la batalla mas solitaria conocida por la Humanidad. Es trágico ver a padres que repudian a hijos e hijas que se han convertido en homosexuales. Su amor y su ayuda es necesaria mas que nunca en estos momentos, pero pocos padres aún considerándose modernos tienen la capacidad de mantenerse a su lado.
La actitud del mundo religioso también ha sido inmisericorde. La iglesia ha despreciado muy apuradamente a estas personas como afeminados y adictos sin esperanza que solo merecen la ira de Dios. Pero un homosexual, niño o niña, es como un corderito que se ha extraviado alguna vez y que está profundamente herido, solitario, desesperado y necesitado de ayuda. Los homosexuales no nacen de este modo. Existe muy poca evidencia de que los rasgos homosexuales sean heriditarios. Hay muchos factores que contribuyen a desarrollar estas tendencias, probando la idea de que los homosexuales se hacen, no nacen. A menudo está conectado con problemas de relaciones entre los padres o entre padres e hijo. Una madre posesiva, un padre cruel y desinteresado, una pobre imágen de alguno de los dos progenitores, una experiencia sexual insatisfactoria en los primeros años, una enseñanza equivocada acerca del sexo, una separación forzada del sexo opuesto, son todos factores responsables de la homosexualidad. El adolescente que vive con uno solo de sus padres no debe tener temor de llegar a ser homosexual. Puede haber un divorcio en el hogar, o la combinación de un padre cruel y una madre posesiva, pero esto no significa que llegues a ser un homosexual. Después de entrevistar a cientos de homosexuales, se considera que muchos se encuentran en esta situación por haber alimentado sus mentes de pornografía homosexual y por haberlo probado para saber cómo es eso. Demasiado tarde ya, algunos confiesan:"Yo fuí demasiado curioso; ahora estoy atrapado, no puedo dejarlo. Solo hace dos años yo ni siquiera sabía lo que la palabra significaba. Ahora soy uno de ellos."Aunque es posible, creible y considerable este testimonio, considero que este caso es fruto de una insatisfacción sexual, emocional y sentimental, también forjada por un equivocado aprendizaje de lo que es la vida sexual normal, y/o la promiscuidad sexual heterosexual que rapidamente puede llevar al deseo de conocer otras experiencias que satisfagan mas los impulsos que no se controlan dentro del matrimonio y/o de la vida prematrimonial abierta a experiencias que desde ya son contraproducentes por no estar realizadas dentro del marco establecido por la propia convicción humana .La homosexualidad no es el resultado de un desequilibrio en las glándulas. Sin embargo, puede ser el resultado de un desequilibrio espiritual. No es correcto calificar a una persona como homosexual si ha tenido una sola experiencia sexual con otro individuo de su mismo sexo. Es frecuente hallar personas que temen llegar a convertirse en homosexuales como consecuencia de una sola e infeliz experiencia. Existe un período mas bien corto en la pre-adolescencia en donde es posible que se experimenten actos que muchas veces no incluyen la penetración ni otro tipo de actos sexuales, pero que se realizan entre personas del mismo sexo. Mostrarse, ostentar, competir y aún tocarse y masturbarse ante otro, otros o uno a otro, es un período pasajero en personas medianamente sanas emocionalmente, pero que tienen graves resultados en adolescentes con los factores de riesgo familiares especificados mas arriba. En estos casos no participa el sentimiento, sino tan solo el instinto, que como cualquier instinto no es controlado, es una reacción casi animal, no es elaborada profundamente, lo produce su propio cuerpo transformándose y sintiendo los deseos sexuales, que no pueden satisfacerse por el canal natural, con una persona del otro sexo. En esto caso gana el instinto en relación a la razón y convicciones. Si el adolescente no está fundamentado en una enseñanza sexual, religiosa y familiar firme y segura, continuará desarrollando este tipo de actos "superficiales" hasta que ellos le provoquen satisfacción plena, incluyendo en estos, el aspecto del amor, amor equivocado, deformado, en el que invierten como si se tratara de una relación heterosexual. Influye en este tipo de secuencia, las faltas de imágenes paternales equilibradas, experiencias negativas, amor y aprobación no recibidos de sus progenitores y personas mayores mas allegadas.

No sigas en contra de Dios

Te invito a que recorras todos los artículos del Blog, en ellos encontrarás diferentes temas, todos relacionados con la necesidad que te guió hasta el blog: homosexual-libre, revisá con detenimiento y cuando te identifiques con detalles, situaciones, tu propio pasado, etc., comienza a hacer tu propia liberación y desarrolla con la ayuda de Dios, la sanidad que necesitas para desenvolverte en la vida.
Deja tus comentarios, tus inquietudes, y paseá por el Blog con el pensamiento de que SE PUEDE ser libre de la esclavitud sexual.
Toma la decisión que cambiará tu vida para siempre.